El autosustento de las mujeres

Dependencias y autosustento energético

En un plano más sutil, podemos adentrarnos en los vínculos transgeneracionales y familiares sostenidos por lazos energéticos que limitan o manipulan el autosustento en general.

Sin entrar en detalles, las personas, en su mayoría, no tienen toda la energía que necesita su sistema. Esa limitación está dada por los bloqueos inconscientes a nivel mental y emocional, los miedos, creencias y demás emociones que nombré anteriormente. Estos crean desarmonías de carencia o vacío en algunos chakras y también de exceso en otros.

La desigualdad energética genera y sostiene vínculos a nivel inconsciente para que podamos recibir lo que nos falta y dar lo que nos sobra, energéticamente hablando y siempre con matices de manipulación en ambos sentidos. Estos vínculos se perpetúan a través del linaje hasta que despertamos, comprendemos y emprendemos la tarea de crear autosuficiencia energética.

Dicha tarea conlleva entrar en lo que está bloqueado, en el registro emocional relacionado, en la creencia o pensamiento restrictivo que lo sostiene y su manifestación corporal. Trabajar con la energía implica permitirse afectarse en múltiples planos. Crear armonía energética facilita la autoobservación y la voluntad, pero si eso no se sostiene con cambios reales y concretos de conductas y hábitos, se desvanece.

La desvalorización se corresponde con una desarmonía de tercer chakra, que justamente nutre la individualidad y el poder personal. El miedo y la sensación de peligro se relaciona con el primer chakra, y lo creativo-expresivo, si has leído Nuestro Útero, ya intuyes que se vincula con el segundo y quinto chakras. La vocación, la misión de vida a nivel intuitivo residen el corazón, cuarto chakra.

El trabajo energético de la mujer comprende la totalidad de su sistema (comúnmente, sucede así con todas las personas sin importan género o historia de vida). La progresiva armonía energética desmantela y transforma vínculos y codependencias, habilitándonos crear y recibir en incondicionalidad, limitando amorosamente y reencauzando nuestra potencialidad energética hacia nuestra misión de vida.

El autosustento surge de armar el rompecabezas con el corazón

Retomemos el autosustento material, si lo pensamos como trabajo, ingreso de dinero, productividad, podemos lograrlo y aun sentirnos vacías, insuficientes, agotadas o infelices. Como dije al inicio, muchas mujeres que han logrado autosustento lo han hecho desde el esfuerzo y la tensión. No se sienten sostenidas ni trascienden la sensación de urgencia.

Mi sugerencia, en todos los casos, es detenernos y abrirnos a sentir. Si realmente hay un deseo de encontrar un camino de autosustento individual verdadero, que esté basado en salud, disfrute y tal vez incluso, vocación, será necesario abrir la caja de pandora y encontrarnos con lo que hay ahí en el plano emocional, mental, corporal y transgeneracional que es, en definitiva, lo que está creando la situación actual y lo que debe reconciliarse para crear la nueva.

¿Con que pieza comenzamos? No lo sé. Depende de ti, de cómo estás, de donde se aloja tu conflicto, de tu salud, de tus emociones, tus creencias y energía. Algunas mujeres sentirán más limitación desde sus miedos, otras lo harán desde la conciencia de sus pensamientos automáticos, otras desde reconocer su cansancio y falta de salud, y otras, al entender la naturaleza de sus vínculos o relaciones.

Debes descubrir cuál es tu primera pieza. Ten certeza que comenzar depende ti. Abres tu corazón a ti misma y te escuchas, te recibes y comienzas la tarea de recrearte. El desafío mayor puede llegar a ser conocer tu propio corazón: ¿qué es lo que crea sentido para ti? ¿Qué disfrutas de dar, sin esfuerzo alguno?

Muchas mujeres no conocen esas respuestas. Han crecido sin conectarse con su mundo interno, sin potenciar su creatividad natural, siguiendo patrones impuestos sobre trabajo, profesión y familia. Nunca es tarde para descubrir quién eres y qué has venido a aportar.

Descubrirlo no significa que abandones lo que llevas construido. Significa que cuando el autosustento se da en concordancia con el corazón es liviano y trae satisfacción y sensación de plenitud.

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