El autosustento corporal enraiza y potencia lo mental-emocional
Podemos pensar el cuerpo o sentir el cuerpo. Lo primero lo idealiza, lo segundo nos enraiza, nos trae a la presencia y al contacto con la Tierra. Toda creación de sustento es siempre aquí y ahora, ni en el pasado ni en el futuro, ni en la proyección de la mente.
Al sentir el cuerpo muchas mujeres conectan con la sensación de no ser suficientes. El cuerpo no nos alcanza para todo lo que debemos-necesitamos-queremos hacer. El cuerpo nos abandona, porque se agota, porque menstrúa, se enferma, nos retiene… como si no fuéramos ese cuerpo.
Mientras vivimos en la proyección mental sin detenimiento, ignorando cansancio, ciclo, dolores, salud y estrés, obviamente que el cuerpo no alcanza. Y si a eso le sumamos la exigencia de regular emociones y pensamientos, sin acompañar la creación de nuevas conductas desde lo corporal-respiratorio, potenciamos el desgaste, sumando aún más estrés y agotamiento.
Podríamos realmente considerar si el autosustento comienza cuando el cuerpo puede sostenerse a sí mismo en orden. Es entonces cuando nos encontramos con la disponibilidad corporal, la suficiencia de este cuerpo que sí puede, que está sano, en contacto con la Tierra a partir de sentir los pies y que está erguido sin esfuerzo o tensión adicional.
Si tu cuerpo, que es tu vehículo para estar en el mundo, está agotado, ¿qué sustento puedes crear para ti y tu familia? Más aún, si tu corazón está agotado, porque das sin límites y nunca recibes o creas espacio para regenerarte, evidentemente no tienes resto para el autosustento.
El cuerpo del desvalor es un cuerpo que se sostiene a sí mismo en tensión, desordenado de la verticalidad natural que lo alinearía con la Tierra. En general, se encuentra apoyado en los talones de los pies y con una fijación de sostén en la espalda alta (dorsal superior). La mirada se pierde hacia arriba, las manos están vacías y la voz encogida. Esa postura dificulta la expresividad natural, tanto emocional como creativa, los planos de apoyo corporales no encuentran Tierra y deben sostenerse a si mismos, causando más desconexión.
Energéticamente, hay chakras y canales energéticos bloqueados y otros sobrecargados. Trabajar en la consciencia corporal-energética para reordenar la postura y comenzar a habilitar la energía que está bloqueada es, interesantemente, un buen recurso para abrir el conflicto de desvalorización y poder comenzar a observarlo.
Del taller de consciencia corporal “El cuerpo del Valor”, próximamente online.
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1 comentario
Taller «Autovaloración desde el cuerpo» – NUESTRO ÚTERO · 29/06/2021 a las 18:42
[…] Esta es una propuesta que se desprende del taller gratuito de mayo: “Autosustento de las mujeres”, que despertó en mi la idea de aportar recursos corporales para crear y cultivar la a autovaloración, como pilar del autosustento en todos sus aspectos. No es requisito haber participado en ese taller, pero si leer el ensayo que publiqué posteriormente (lo encuentras aquí). […]